La abundancia de conductas y parejas sexuales no siempre va de la mano de sentimientos de placer y felicidad. Éstos son misteriosos también en lo que al sexo se refiere. Podríamos pensar que las personas promiscuas, físicamente atractivas, que tienen parejas sexuales a disposición para poder dar rienda suelta a sus fantasías, viven en el colmo de la felicidad sexual. Sin embargo, el ser humano es complejo.