Un playboy, al que imaginas regalándote los oídos, primero, y jadeando ansioso, después. Es difícil obviar el enorme parecido de John McCain, el candidato republicano, con el actor Steve Martin. Así que los papeles divertidos que protagoniza el famoso intérprete pesan al recrearle en la intimidad. Caradura, patoso, tierno y golfete. Experto en mantener las apariencias y con una blazer de botones dorados que está pidiendo a gritos que se la quites ya. Matando el rato en el wc del avión o aprovechando un minuto libre bajo la mesa del despacho. Así debe ser él.