Todo está presto y dispuesto para nuestra eterna "final" de cuartos. Dicen que se conquista por el estómago, así que vamos a ver una peculiar y diferente visión del partido que España disputará contra Italia el próximo domingo. ¿Qué van a tomar?
mj*laflaca (flickr)
Italia y España, dos equipos tan diferentes como la pasta y arroz, dos combinados con un sabor distinto que cuentan con unos ingredientes muy jugosos. Hay muchas formas de preparar un buen plato de pasta y una buena paella, pero para que la comida sea exquisita ambos platos tienen que estar en su punto. Y en ello están tanto Roberto Donadoni como Luis Aragonés, preparando el partido a fuego lento y cuidando cada mínimo detalle para que el menú del domingo sea todo un éxito.
El entrenador italiano no podrá contar con Gatusso y con Pirlo, dos condimentos básicos para Italia que aportan un toque especial. Gatusso es como la pimienta: da intensidad y corpulencia al producto. Pirlo se asemeja más al queso parmesano rallado que acompaña a la pasta, ofreciendo un sabor particular. Sin pimienta y sin queso parmesano la pasta sabe distinta. Ni mejor ni peor, simplemente diferente. Como sustitutos se perfila Camoranesi y De Rossi, dos jugadores muy rápidos y polivalentes que tienen ganas de jugar unos cuartos de final frente a España, por todos los alicientes que tiene este partido.
La "azzurra" es un plato fuerte para nuestra selección y una comida difícil de digerir porque se repite mucho. Los italianos acumulan 4 Copas del Mundo y una Eurocopa y no en vano son los vigentes campeones mundiales. Cierto es que aquellos campeones son los mismos pero su entrenador no, y ésta es una diferencia sustancial. Lippi tenía la receta para combinar a la perfección cada ingrediente y sabía cocinarlos conjuntamente. Por contra, Donadoni siembra más dudas. Su esquema de juego no es tan fijo y eso puede despistar a sus jugadores. Para que una selección triunfe tienen que conocer su cometido exacto de forma precisa, y en estos momentos en Italia hay un plan a, un plan b e incluso un plan c. Esto es bueno en ocasiones, pero perjudicial en otras.
Sin duda, el mayor peligro de Italia es y será Luca Toni. El jugador del Bayen no ha marcado hasta el momento ni un solo gol, pero oportunidades no le han faltado. No ha tenido suerte porque en los 3 partidos que ha disputado sus actuaciones han sido más que aceptables. Tiene movilidad y calidad suficientes para crear peligro a cualquier defensa, y más aún a la española, que durante la primera fase ha mostrado carencias por alto y falta de sincronización entre los dos centrales, Marchena y Albiol. La pegada del italiano el domingo podría ser mortal y nuestros jugadores tendrán que estar alerta a cualquier pelota que toque Toni. En esta Eurocpa, la selección española está jugando con el fuera de juego tensando mucho la cuerda. Esperemos que esta no se rompa porque la artillería italiana no perdona, y remontar un gol ante los italianos es tan complicado como ganar a los alemanes. Son dos reglas del fútbol que siempre se cumplen.
España disfruta más con su paella. Un producto peculiar puesto que no se compone de un sólo ingrediente sino que su sabor se consigue mezclando muchos y variados. El arroz es importante pero no determinante, lo que cuenta son otras cosas. Y de eso vive nuestra selección, de la combinación de sus jugadores. En una buena paella el aceite de oliva y el azafrán tienen que estar muy presentes, y de eso se encarga Xavi Hernández y David Villa. Por el momento ellos han sido los grandes protagonistas de nuestro combinado nacional. Xavi por el trabajo "invisible" que realiza, sin el cual no habría juego "visible", que es el que materializa el delantero del Valencia, Villa, hasta el momento pichichi del campeonato.
La paella puede ser de marisco o de carne, pero Luis Aragonés ha optado por una paella mixta. El marisco suele ser más fino y más sabroso que el conejo o el pollo, que aporta intensidad. El toque de nuestra selección depende de jugadores como Andrés Iniesta, Xaby Alonso o Cesc Fábregas; lo que, combinado con jugadores fuertes como Senna o Torres, son el equilibrio adecuado para un buen plato.
Los partidos pasan por muchos momentos y en cada fase se requieren distintas cosas, y los de Luis han demostrado estar capacitados para ello. Han conseguido goleadas y remontadas, lo cual indica la confianza que tienen los jugadores.
El domingo hay una cita especial, con muchas cosas en juego. La clave de España estará en olvidar el pasado y centrarse en el presente sin pensar en el futuro. Serán 90 minutos donde los italianos tirarán de oficio y los españoles de calidad. Si España entra en su juego estamos perdidos, si Italia entre en el nuestro saldremos victoriosos. En veteranía y picardía nos ganan por goleada, en calidad y en juego la ventaja es nuestra. El que se despiste perderá.
Aunque de todos es sabido que los viernes apetece pizza, los domingos son para la paella. España e Italia: un partido diferente, dos platos enfrentados. ¿Qué te apetece a ti?
Carlos F.
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