En la ciudad donde más que en ningún otro lugar del planeta ‘el tiempo es oro’ no hay un minuto que perder. Es por ello que lejos de la cultura mediterránea, donde la comida es casi un culto, aquí, sobre todo durante el día, no es difícil ver gente llevándose bocados a la boca en cualquier esquina, cualquier banco, andando por la calle… Los carritos de comida rápida proliferan cerca de los grandes edificios de oficinas y el concepto ‘to go’ (para llevar) se convierte en el recurso más preciado para no perder el ritmo de la gran ciudad.
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.