Fieles colman un pequeño pueblo patagónico a la espera de la beatificación de Ceferino

Buenos Aires.-  El mapuche argentino Ceferino Namuncurá será beatificado este domingo en un pequeño pueblo de la Patagonia durante una ceremonia encabezada por el secretario de Estado vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, a la que se espera acudan más de 150 mil personas.

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(EFE)

Imagen fotográfica coloreada, de Ceferino Namuncurá (1886-1905), hijo ilegítimo de un cacique mapuche y una cautiva.

Centenares de personas ya se encontraban hoy en los alrededores del Parque Ceferiniano de Chimpay, una población de 5.000 habitantes que abrieron las puertas de sus casas para albergar a los asistentes a la ceremonia en la que por primera vez llegará a los altares un indígena argentino.

Fuentes de la organización indicaron incluso que no sólo Chimpay agotó sus plazas, sino también las ciudades situadas a casi 400 kilómetros de este pueblo de la provincia argentina de Río Negro, a unos 1.076 kilómetros al sur de Buenos Aires, donde el beato Ceferino nació el 26 de agosto de 1886.

Además, numerosos fieles llegaban este sábado a pie al pueblecito del valle del río Negro para demostrar su devoción a Ceferino, quien se convertirá en el segundo aborigen de América en alcanzar los altares de la Iglesia Católica, después del mexicano san Juan Diego.

Para facilitar la llegada de los fieles, las autoridades argentinas también dispusieron que un tren de pasajeros volviera a llegar hoy a Chimpay después de 16 años de interrupción, lo que es considerado por algunos lugareños como "un nuevo milagro" del joven beato, que murió en Italia a los 18 años.

La ceremonia, que comenzará a las 14.00 GMT, será presidida por el cardenal Bertone, enviado del Papa Benedicto XVI e integrante de la congregación salesiana, que tuvo una significación clave en la vida de Ceferino Namuncurá.

Durante la beatificación se pronunciará un mensaje en lengua mapuche en homenaje al origen de Ceferino, al tiempo que caciques de diferentes comunidades harán rogativas por él, entre ellos Celestino Namuncurá, descendiente del beato, que quería ser sacerdote para evangelizar a su postergado pueblo.

A la ceremonia, televisada a varios países, también asistirán el cardenal primado de Argentina, Jorge Bergoglio; el rector mayor de la orden de San Francisco de Sales, el mexicano Pascual Chávez; unos 80 obispos del país y del exterior, el vicepresidente argentino, Daniel Scioli; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri; y el embajador ante la Santa Sede, Carlos Custer.

No se descarta la presencia de la presidenta electa de Argentina, Cristina Fernández, aunque su asistencia aún no ha sido confirmada por fuentes oficiales.

También se espera la presencia de la protagonista del milagro atribuido a Ceferino que permitió su beatificación, una mujer de la provincia de Córdoba, centro del país, que en el año 2000, cuando tenía 24 años, pidió su intercesión ante Dios para salvarla de un cáncer de útero y se curó, hecho que la ciencia no pudo explicar.

Un millar de policías custodiarán el parque donde se desarrollará la ceremonia y las inmediaciones de Chimpay, que cada 26 de agosto recibe unos 30 mil fieles que viajan para demostrar su devoción por el indígena, pese a que no contaba todavía con una autorización eclesial formal.

El cardenal Bertone llegará hoy a Fortín Mercedes, ubicado a 840 kilómetros al sur de Buenos Aires, para celebrar una misa ante la tumba de Ceferino Namuncurá.

El programa de actos se inició el viernes, con la inauguración de la iglesia consagrada al Cristo de la Tierra y de la Vida en el Parque Ceferiniano de Chimpay.

Las actividades continuaron hoy con una misa de bienvenida a los peregrinos, en la que la emoción se unía al interés por la ceremonia.

También está prevista la celebración de un encuentro musical de jóvenes en honor del indígena, cuya causa de beatificación fue iniciada en 1947, pero fue autorizada el pasado 6 de julio por Benedicto XVI.