El GOB pide más vigilancia de la pesca ilegal y rechaza los arrecifes artificiales

Palma.-  El GOB reclama al Govern más inspecciones, vigilancia y un mayor control para "hacer cumplir la normativa de pesca" y combatir las prácticas ilegales por parte de las embarcaciones de arrastre, de forma que se pueda evitar "llenar el fondo marino de arrecifes artificiales".

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(EFE)

En la imagen, explosivos para su uso presuntamente en la extracción de recursos pesqueros.

El grupo ecologista critica en un comunicado el programa que desarrolla la Conselleria de Agricultura y Pesca desde los años ochenta, con la colocación de módulos de hormigón que evitan que las embarcaciones de arrastre pesquen a menos de 50 metros de profundidad, donde tienen prohibido faenar.

El GOB califica esta práctica de "un modelo de ocupación artificial y destrucción del territorio natural" y asegura que estudios científicos de seguimiento de los arrecifes artificiales situados en Baleares han demostrado que los módulos de producción realmente no producen vida marina.

Según el GOB, estos módulos tienen un efecto de concentración de peces de las áreas naturales cercanas "algo que puede facilitar su pesca".

Los ecologistas denuncian que esta concentración de peces en los arrecifes artificiales puede producir "una situación de sobrepesca de las flotas de artes menores en la zona si las medidas de protección y vigilancia no son las adecuadas".

El GOB afirma en la nota que en Baleares "no es necesario crear hábitats artificiales para los peces" y pide una gestión adecuada de los enclaves favorables al mantenimiento de la biodiversidad, para que se recuperen los hábitat marinos de las islas.

Como alternativa a la colocación de arrecifes, el GOB recuerda que todas las "barques de bou" de Baleares, dedicadas a la pesca de arrastre, están obligadas a llevar un sistema de seguimiento de su actividad, llamado "cajas azules", que permite ubicar la posición exacta de estos barcos durante toda su jornada de pesca.

Según el GOB, un control adecuado de las cajas azules permitiría "detectar y sancionar a las embarcaciones que no respeten el límite de los 50 metros de profundidad", que según el grupo ecologista son una minoría de la flota.

El Grupo de Ornitología Balear y Defensa de la Naturaleza explica que el control de las cajas azules es competencia del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y reclama una mayor colaboración entre los gobiernos estatal y autonómico en materia de control de la pesca ilegal.

El GOB recuerda que "algunas de las reservas marinas de Baleares ni están balizadas, ni cuentan con vigilancia".

La semana pasada, la Conselleria de Agricultura y Pesca procedió al hundimiento de un total de 483 arrecifes artificiales de protección y 28 de producción, en la costa de levante de Mallorca, para evitar el arrastre ilegal y proteger el fondo marino y las praderas de "posidonia oceánica".

La actuación forma parte de un proyecto iniciado en 2004, cuando se hizo un estudio del fondo marino que detectó marcas de las redes de arrastre a menos de 50 metros de la costa.

El proyecto de colocación de arrecifes artificiales, se divide en tres fases que cubren desde cala Figuereta, en Santanyí, hasta Cala Bona, con un coste total de actuación de 1,2 millones de euros, financiados al 50 por ciento por la Conselleria de Agricultura y Pesca y a cargo de fondos europeos de pesca IFOP.