Nadal y Ferrer dan la sorpresa al caer ante Ferrero y Stepanek

Roma.-  El español Juan Carlos Ferrero, campeón en el 2001 y el checo Radek Stepanek dieron hoy la sorpresa en el Masters Series de Roma al eliminar a Rafael Nadal y David Ferrer, número dos y número cinco del mundo, respectivamente.

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(EFE)

El jugador español Juan Carlos Ferrero devuelve la bola a su compatriota Rafael Nadal durante el partido del Masters Series de Tenis de Roma (Italia) disputado.

La segunda derrota en tierra de Nadal en 105 partidos, la primera desde que cayó ante el suizo Roger Federer en la final del torneo de Hamburgo el año pasado, llegó después de que el de Manacor hubiera ganado en el Foro Itálico tres años consecutivos, con 17 triunfos seguidos en esta pista. Supuso su primera decepción ante un español, desde los cuartos de final del torneo de Stuttgart, el 16 de julio de 2004, contra David Ferrer.

Nicolás Almagro se sumó a esta jornada sorpresiva al vencer al argentino David Nalbandian, número siete; mientras que Fernando Verdasco cumplió pronóstico al eliminar al ecuatoriano Nicolás Lapentti, al igual que Tommy Robredo que se deshizo del francés Nicolas Mahut.

La sorpresa mayor fue la de Nadal que cayó ante Ferrero por 7-5 y 6-1, aunque el mallorquín dijo después del partido que ya había avisado en Barcelona de que es "imposible" jugar a tan alto nivel durante cuatro semanas seguidas.

La victoria de Ferrero se produjo tanto por su excepcional juego de hoy como por las heridas que Nadal tenía en el pie derecho, causadas por ampollas. Con todo, Nadal aseguró a la prensa que este no era el momento para hablar sobre la gran cantidad de partidos concentrados a los que se ven sometidos los tenistas, ya que se podría pensar que se trataba de una excusa para justificar su derrota.

Nadal se mostró muy decepcionado por el resultado y explicó que sus molestias empezaron el domingo y que éstas continuaron pese a que los médicos le habían aplicado cremas y vendajes para aliviar el dolor.

Ferrero defendió que su victoria se basó en su "agresividad" y "buen tenis", aunque reconoció que el mallorquín había sufrido algunos problemas físicos.

El valenciano, que señaló que él también estaba lesionado con problemas en el abductor, aseguró que con la caída de Nadal "la clasificación está muy abierta".

El valenciano deberá enfrentarse ahora al suizo Stanilas Wawrinka, que hoy venció al británico Andy Murray por 6-2 y 7-6(5).

Otra sorpresa del día fue la derrota de Ferrer a manos de Stepanek por 4-6, 6-2 y 6-1 en la primera ocasión en que se encontraban en tierra batida.

Ferrer no tuvo su mejor día, mientras que Stepanek, que ahora se enfrentará al peruano Luis Horna, no perdonó los fallos del valenciano.

Frente a la caída de Ferrer destaca la victoria de Almagro a Nalbandian por 6-4 y 7-5.

Se trata de la segunda ocasión en que el murciano vence a Nalbandian sobre tierra batida, la primera de ellas este mismo año en Acapulco (México), donde le ganó en la final.

El español dijo en declaraciones a EFE después del partido, que se encuentra "feliz por haber avanzado otra ronda" y que espera seguir jugando como lo está haciendo, aunque subrayó que "va a ser muy difícil mantener el ritmo" que lleva ahora mismo.

"He desplegado un nivel de tenis alto y se que debo mantenerlo de cara al próximo compromiso", comentó el tenista, que añadió que tiene "la ilusión y las ganas de trabajar para que esto continúe".

Almagro deberá enfrentarse ahora al chileno Fernando González con el que ha perdido en las dos ocasiones en las que han jugado, la última en el Masters Series de Madrid.

Verdasco, por su parte, ganó a Lapentti, quien se encuentra en un gran momento de forma, por 6-2, 7-5 y 6-2 y ahora tendrá que enfrentarse al estadounidense James Blake, con el que sólo se ha medido una vez el año pasado y perdió.

Con la victoria, Verdasco colocó el marcador de los duelos entre ambos en un 4-1 y se sacó la espina de haber perdido el último hace unos días en Barcelona.

El último español en liza fue Robredo quien eliminó a Mahut por 7-5 y 7-6(5) en un partido muy igualado.