Gadafi considera una "afrenta" el proyecto francés de Unión por el Mediterráneo

Argel.-  El líder libio, Muamar el Gadafi, consideró hoy que el proyecto francés de Unión por el Mediterráneo (UPM) es "una afrenta" a los países árabes y lo calificó de "idea pasajera y momentánea" que puede "atentar contra la unidad" de los países árabes y africanos.

Ante los presidentes de Argelia, Siria, Túnez, Mauritania y el primer ministro de Marruecos -invitados a Trípoli por Gadafi para tratar la UPM-, el líder libio afirmó que los proyectos económicos que propone esta iniciativa son "un cebo" y "una especie de humillación" para los países árabes.

"Nosotros no somos ni hambrientos, ni perros para que nos echen huesos", proclamó.

La cumbre de Trípoli, que no se anunció oficialmente y que concluyó esta tarde sin ningún tipo de declaración conjunta, fue organizada por Gadafi para intentar establecer una posición común ante el proyecto impulsado por el presidente francés, Nicolás Sarkozy, que debe lanzarse en una cumbre de jefes de Estado en París el próximo 13 de julio.

Sin embargo, los países árabes del Mediterráneo y los del Magreb han mostrado considerables diferencias respecto a la iniciativa.

Mientras que algunos como Egipto, Túnez y Marruecos se han pronunciado a favor, otros como Argelia, Libia o Siria han expresado serias reticencias.

El presidente egipcio, Hosni Mubarak, había sido invitado también a la cumbre de Trípoli, pero finalmente no asistió, según algunas fuentes, para no tener que encontrarse con su homólogo sirio, Bachar el Asad, debido al deterioro de las relaciones entre ambos países desde el asesinato del ex primer ministro libanés Rafic Hariri.

Tanto Siria, como Argelia, Libia o Mauritania recelan de ingresar en un proyecto como la UPM, en el que también estará Israel, sin conseguir ninguna concesión del Estado hebreo en las negociaciones de paz con los palestinos y con Siria.

El ministro de Exteriores argelino, Mourad Medelci, declaró que toda normalización de las relaciones entre su país e Israel debe basarse en la propuesta de paz de la Liga Árabe de 2002, que demandó la retirada israelí de todos los territorios ocupados desde 1967.

Tras la reunión de los ministros de Exteriores del Foro Mediterráneo en Argel el pasado viernes, Medelci afirmó que su país exigirá que la declaración final de la cumbre de París incluya una demanda a Israel en ese sentido.

El ministro argelino de Comunicación, Abderachid Boukerza, dijo hoy que Argelia "no rechaza la Unión por el Mediterráneo", pero reclamó una "visión más clara sobre el contenido de la iniciativa, su organización y su alcance político".

Los argelinos tampoco han acogido favorablemente la posibilidad de que se ofrezca la sede de la UPM a Túnez o a Marruecos y no han dado por el momento su visto bueno a la presencia de su presidente, Abdelaziz Buteflika, en la cumbre de París.

Gadafi ya ha anunciado que no acudirá a la capital francesa, aunque Libia contaba ya solamente con un estatus de observador en el Proceso de Barcelona, el antecedente del proyecto actual, en el que nunca se integró plenamente.

El líder libio señaló hoy en la cumbre de Trípoli que la Unión Europea (UE), "que persigue su cohesión, ha rechazado el proyecto inicial del presidente francés, Nicolás Sarkozy, ya que no quería permitir una división de la Unión".

"Nos toman por idiotas. Nosotros no pertenecemos a Bruselas. Nuestra Liga Árabe está en El Cairo y nuestra Unión Africana en Adis Abeba. Si quieren cooperar hace falta que pasen por esas capitales", afirmó.

Asimismo, consideró que el proyecto de la UPM "es una idea pasajera y momentánea" y recalcó que los países árabes rechazan "sacrificar lo que es esencial, la unidad de la nación árabe y de la africana, frente a proyectos de inversión pasajeros".

"Es la parte europea que ha reflexionado, decidido y cortado y nos pide que nos vistamos con lo que ella ha cosido", aseveró Gadafi.