Contra el calor cordobés, ¿una cervecita?

CÓRDOBA.-  Quizá muchos piensen que esta calurosa época estival no sea la más adecuada para dejar caer su osamenta por tierras del interior de Andalucía. Lugares como Córdoba, donde los termómetros se disparan enloquecidos hasta cotas inimaginables, e incluso los servicios de limpieza suelen recoger con bastante asiduidad restos de guiris derretidos sobre el asfalto gracias a su peregrina idea de dar un voltio por la Mezquita a las tres de la tarde, no parecen muy apetecibles de visitar.

Sacred Destinations (Flickr)

Córdoba tiene una oferta más allá de la famosa mezquita.

Sin embargo, existe también una Córdoba nocturna en la que sí se puede dar un garbeíllo por sus calles y jardines durante el periodo de la canícula. Uno de estos jardines en los que merece la pena detener la caminata y refrescarnos las tripas, a igual que la vista, son los de la Victoria. Y es que dentro de estos céntricos jardines se encuentra La Pérgola, un reformado edificio neoclásico levantado en 1929 por el arquitecto Carlos Sáez de Santamaría.

La idea original de dotar a esta ajardinada zona de un lugar de esparcimiento para los cordobeses ha perdurado con los años. La gente se sigue reuniendo aquí para degustar todo tipo de bebidas y decirle cositas a las chicas (y chicos obviamente en el caso femenino), como también se haría antaño, sólo que quizá con diferente canon de belleza aunque seguramente con igual número de fracasos.

La pérgola

La Pérgola, una idea para huir del calor.

El ambiente es agradable, con una amplia terraza en la que se puede escuchar música en directo de jueves a sábado, con actuaciones de numerosos grupos de los más diversos estilos. Hay una barra especial para mojitos, cuyo hielo es ideal para cauterizar un poco el típico banderillazo asestado sin compasión por aquella espectacular rubia que parecía receptiva... Pero que sin embargo viene fantástico para reponer fuerzas y ánimos para el siguiente envite.

Dentro, hay una amplia sala a ambos lados de la puerta central, el cielo y el infierno, pues cada una esta decorada bien de blanco con motivos azules (y creo recordar que ángeles en los techos), bien con cortinas rojas y decoración digamos que algo más malota y que da un ambiente algo más pícaro. Las salas están preparadas para fiestas privadas, presentaciones de productos, reuniones de empresas… (Quien firma esto le tiene cariño, pues en el infierno presentó su primer libro, con posterior fiesta ochentera, y quedó todo muy salao)

Si van por Córdoba este veranito, La Pérgola es uno de esos lugares donde uno puede tomarse tranquilamente una cervecita al aire libre sin necesidad de llevar un ventilador adosado a la chepa.