El jefe negociador palestino y la "necesidad e interés" israelí

Jericó (Cisjordania).-  Que la clase dirigente israelí empieza a ser consciente de que a Israel le conviene para su propia supervivencia la creación de un estado palestino es algo en lo que aún pocos creen, y todavía menos entre los palestinos.

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(EFE)

El jefe negociador palestino, Saeb Erekat.

El jefe negociador palestino, Saeb Erekat, es de esos pocos aunque no se lleva a engaño; atribuye el fenómeno a que los israelíes comienzan a darse cuenta de cuales son sus verdaderas "necesidades e intereses", y advierte que "es un proceso en marcha".

"Ese proceso se ha iniciado y no se ha completado pero las cosas van en ese sentido", afirmó Erekat en una entrevista que concedió a Efe en su despacho de la ciudad cisjordana de Jericó, al norte del Mar Muerto y un islote de verdor en medio del desierto de Judea.

"La clave siempre está en el juego de necesidades e intereses porque el entendimiento es únicamente posible cuando uno sabe cual es su auténtica necesidad e interés", explicó.

Viejo interlocutor de los israelíes -con quienes se ha sentado en decenas de ocasiones en la mesa de negociación-, Saeb Erekat admitió que la percepción de "las verdaderas necesidades e intereses de Israel" es una tendencia "nueva" en el liderazgo del Estado judío.

"No tiene precedentes y veremos hasta donde llega", dijo.

El apunte del jefe negociador palestino refrenda el argumento que el primer ministro israelí, Ehud Olmert, utiliza para justificar ante sus conciudadanos la necesidad de sacar adelante la actual negociación para crear un estado palestino como garante de Israel.

Olmert prevé que Israel no podrá asumir a medio plazo el control político, económico, militar y social de los palestinos por su mayor índice de natalidad, muy superior al de los judíos.

Por lo que teme que si no se crea un estado para ellos los palestinos acaben por protagonizar una sublevación como la que en Sudafrica llevó a la mayoría negra a poner fin al apartheid.

Erekat también hace ese paralelismo, al considerar que Israel "tiene tres posibilidades: dos Estados que vivan en paz -uno palestino y uno israelí-, un estado binacional en el que convivan los dos pueblos, y la actual situación, que ya es de apartheid".

Pese a que asimismo coincide con el primer ministro israelí en que la mejor fórmula es "dos estados para los dos pueblos", el jefe negociador palestino reconoce que las diferencias entre ambas partes son aún grandes para la consecución de un acuerdo a fines de año.

"La negociaciones continúan y es posible cumplir el plazo", se limitó a precisar sobre esa meta, fijada en diciembre en Annapolis.

Adelantó, no obstante, que "el acuerdo lo incluirá todo, o no incluirá nada", en alusión al rechazo palestino a la propuesta israelí de que el nuevo estado solo incluya Gaza y el 93 por ciento de Cisjordania, y postergar el asunto del estatus de Jerusalén.

"Tras firmar el acuerdo, si es que lo firmamos, lo someteremos a referéndum y después convocaremos elecciones, esperamos que en 2009", auguró Erekat, con la esperanza de que esos comicios supongan la reconciliación con los islamistas de Hamás, que controlan Gaza.

"La verdad es que la situación interna israelí -con la próxima sustitución de Olmert como primer ministro israelí-, no ayuda nada, pero tampoco ayuda nada nuestra situación interna", reconoció.

"En Palestina no ha fallado la democracia, lo que ha fallado ha sido Hamás, que no ha gobernado para todos los palestinos", aseguró sobre el movimiento islamista, tras anotar, respecto al reemplazo de Olmert, que "negociamos con Israel, no con tal o cual persona".

"Negociamos con los israelíes igual que ellos, exclusivamente de acuerdo -puntualizó-, con nuestras necesidades e intereses".

Nacido en 1955 en el Este de Jerusalén -donde los palestinos exigen establecer la capital de su estado-, Saeb Erekat es el jefe negociador palestino desde mediados de la década pasada, tras ganarse la confianza del histórico líder Yaser Arafat.

Miembro de Al Fatah, Erekat fue confirmado en el cargo por el sucesor de Arafat al frente de ese movimiento nacionalista y en la presidencia palestina, Mahmud Abás, de quien también es asesor y al que le une una relación muy particular y que viene de antiguo.

Erekat, que siempre se ha distinguido por una visión de futuro que ha ido a contracorriente entre los palestinos, fue uno de los primeros dirigentes de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) que se mostró partidario del diálogo.

"En 1979, siendo profesor de la Universidad de Nablusa, escribí un artículo que me valió muchas críticas por ese motivo" relata, rememorando una época en que la que eran frecuentes entre los palestinos las ejecuciones de delatores y traidores.

"Fue Abu Mazen (nombre de guerra de Abás) quien dijo que me dejaran tranquilo, que no me hicieran nada", recuerda.