El ministro de Trabajo inauguró en Lugo la nueva sede de la Seguridad Social

Lugo.-  El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha inaugurado hoy en Lugo la nueva sede de la Seguridad Social, en la que se invirtieron 13,6 millones de euros, que cuenta con unas oficinas en las que serán atendidos unos 100.000 jubilados y 127.000 trabajadores.

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(EFE)

El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho (2d), junto a las primeras autoridades locales y provinciales, a su llegada al nuevo edificio de la sede conjunta de la Dirección Provincial de la Tesorería General y el Instituto Nacional de la Seguridad Social en Lugo.

El titular de Trabajo aprovechó su primera visita oficial a la capital lucense para realizar una parada en el Ayuntamiento de Lugo, donde fue recibido por representantes de la corporación local, con su alcalde, el socialista José López Orozco.

Fue en el despacho de la alcaldía, donde Corbacho recordó su llegada a Cataluña y su paso por la alcaldía de Hospitalet, un municipio en el que se convirtió en la segunda ciudad de Cataluña y donde residen, entre otros, 10.000 gallegos, 50.000 andaluces y 8.000 extremeños.

Destacó el trabajo que realiza el centro gallego e incluso sostuvo que el mejor grupo de gaitas de Galicia se encuentra en Hospitalet, pese a que los nuevos gaiteros son "gente que ya no ha nacido en Galicia".

Corbacho dijo que "es curioso como entre la comunidad gallega se da esa transmisión de sentimientos de origen y de pertenencia en un índice superior al de otras comunidades", precisó.

En su estancia en el Consistorio recogió la petición de trasladar al ministro de Turismo, el próximo viernes, la idea que impulsaron los alcaldes de Lugo, A Coruña y Santiago para promocionar, conjuntamente, los Patrimonios Mundiales de la UNESCO de los que gozan estas 3 ciudades.

Luego departieron en solitario el alcalde y el ministro, donde López Orozco explicó al titular de Trabajo que Lugo es "el primer Ayuntamiento de España en inversión en persona".

Corbacho recordó que las competencias en políticas activas corresponden a las comunidades autónomas, aunque reconoció que el Gobierno del Estado "siempre puede coparticipar, cuando los proyectos son específicos y singulares", entre los que enmarcó el Plan E.

En esta línea recordó que el Gobierno impulsará, el próximo año, un nuevo plan de 5.000 millones de euros que, sostuvo, "continuará permitiendo esa posibilidad de cooperación bilateral entre el Estado y los ayuntamientos".

Desde el Ayuntamiento el ministro se trasladó a la inauguración de lo que definió como "un magnífico edifico", en el que se acogen todas las dependencias de la Seguridad Social en Lugo.

Dijo que esta infraestructura demuestra una "apuesta decidida" de la Seguridad Social por ir modernizando sus instalaciones en todas las capitales, "para mejorar, a la vez, la atención al ciudadano y a las empresas y conseguir mayor eficiencia con la concentración de servicios que, hasta la fecha, estaban dispersos".

Al margen de la inauguración, Corbacho reconoció que la crisis económica impactó "de manera muy directa" en la Seguridad Social a partir de agosto del pasado año, con mayor crudeza en los últimos 3 meses de 2008 y, de forma especial, en enero de 2009.

Recordó que en esta fase se perdieron 1,3 millones de afilados, lo que "fue un impacto muy negativo sobre la Seguridad Social y sus afiliados", aunque también aprovechó para indicar que a partir del mes de febrero esa tendencia se ha paralizado e incluso, aseguró que "llevamos un par de meses en la que no sólo se mantiene, sino que ha ganando algunos afiliados, que la dejan a día de hoy por encima de los 18 millones", concretó.

Admitió que este fenómeno también se reprodujo en la afiliación de extranjeros, que estaba en 2,1 millones antes de la crisis, que después se vio reducida a 1,8 millones y que ahora ha repuntado, también en este ámbito en unos 100.000 afiliados extranjeros.

También se refirió al acuerdo que existe entre la representación social de los trabajadores de la planta de Leche Pascual en Lugo y la patronal burgalesa, para un ERE temporal de 4 meses con salidas incentivadas.

Ante este consenso, el titular del ministerio de Trabajo, sostuvo que lo normal es que el acuerdo reciba el visto bueno por parte de la autoridad laboral.