Una experta advierte de una crisis de humanitarismo porque se asocia a los militares

Murcia.-  La presidenta de la Sociedad Española de Medicina Humanitaria, Pilar Estébanez, ha dicho hoy que existe una crisis de humanitarismo por la naturaleza compleja de los conflictos, la perversión del término humanitario ya que se asocia a los militares, por lo que a veces se dirigen a los cooperantes los ataques terroristas.

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(EFE)

En la imagen, la presidenta de la Sociedad Española de Medicina Humanitaria, Pilar Estébanez. EFE/Archivo

Estébanez, que hizo estas declaraciones en la II Jornada Quirúrgica de Cooperación Internacional que se celebra en Murcia, criticó el uso creciente y el abuso de la terminología humanitaria, la manipulación de la ayuda por intereses políticos, la violación permanente de los principios humanitarios y el fin del humanitarismo moderno.

Uno de los retos del nuevo humanitarismo es hallar un espacio donde poder trabajar con seguridad e independencia, y lograr llegar a un lugar donde se necesite ayuda conociendo el contexto político para evitar lo ocurrido en Sri-Lanka, con un conflicto desde 1983 al Nordeste del país con la etnia Tamil, que se agravó con el impacto del Tsunami.

Citó el caso de la guerra de Irak con una única acción humanitaria militar, y el más reciente caso de Afganistán como un ejemplo fragante de perversión humanitaria con la violación de los principios de imparcialidad que rigen el código ético humanitario de curar a todas las víctimas sin discriminación.

En este sentido, recordó que el humanitarismo que conocemos lo creó Cruz Roja en 1865 para atender en el campo de batalla a las víctimas de los bandos enemigos, hasta entonces abandonadas a su suerte, y señaló que en los años 80 se inició un impacto mediático de Acción Humanitaria que ha contribuido a un creciente auge en el escenario internacional con la apropiación del discurso y la instrumentalización por parte de los gobiernos, con la proliferación de actores y críticas al sentido asistencial clásico.

Aquel humanitarismo clásico que estaba orientado a salvar vidas y que tenía un objetivo paliativo de aliviar el sufrimiento está siendo sustituido, en su opinión, por otro que apuesta por una ayuda políticamente consciente que persigue objetivos más amplios como el desarrollo, la paz y los derechos humanos, y que entiende en ocasiones la posible opción de no actuar.

A su juicio, el atentado del 11 de septiembre de 2001 fue el motor del cambio de la nueva acción humanitaria y la guerra contra el terrorismo ha marcado los conflictos de este siglo, mientras que los cambios climáticos están siendo los protagonistas de los desastres naturales, a lo que se suman las tres grandes pandemias (sida, malaria y tuberculosis) y el hambre, todo lo cual provocará catástrofes humanitarias.

En este siglo las emergencias son mas complejas, persisten en el tiempo, tienen en algún caso intereses económicos por medio, la mayoría de los muertos son civiles, las ONGs tienen mas dificultad para atender a esa población civil y faltan garantías de seguridad para los cooperantes.

Comentó las críticas a los humanitarios por su contribución a la prolongación de algunos conflictos y puso el ejemplo de Etiopía en los años 80, donde tiraban la ayuda alimentaria que llegaba, ya que los militares cobraban un dinero por cada camión que entraba y buscaban eternizar la situación.

En el nuevo contexto humanitario comentó la existencia del "Proyecto de la Esfera", iniciativa lanzada en 1997 por un grupo de organizaciones humanitarias con el objetivo de establecer, por primera vez, una serie de normas mínimas universales en las áreas más importantes de la ayuda humanitaria de modo que ésta vea mejorada su calidad y su rendición de cuentas.